El cerebro es "maleable" y puede transformarse en el curso de las experiencias.. En una jerga más científica, se trata de la neuroplasticidad del cerebro.
Específicamente, las neuronas pueden desarrollarse y adaptarse dependiendo de las acciones, pensamientos o imágenes percibidas.
La neuroplasticidad cerebral ahora no solo es explotada para tratar enfermedades del cerebro, para rehabilitar, sino también para aumentar la memoria...
Neuroplasticidad del cerebro, definición
Neuroplasticidad cerebral es un término para la capacidad del cerebro recurrir a estímulos externos y volver a su estado original cuando la solicitud se detiene.
La neuroplasticidad cerebral concierne a todas las áreas del cerebro. Así, desde las moléculas pasando por la recepción hasta la transmisión de los impulsos nerviosos, todo puede ser modificado.
Sinapsis cerebral (conexiones entre neuronas) y el cuerpo de la célula pueden entonces formarse de nuevo por la actividad y en base a las experiencias.
Las neuronas retroceden o se desarrollan y las conexiones pueden cambiar en el curso del tiempo.
Tenga en cuenta que no es exclusivamente la transformación: también se puede crear nuevas neuronas y nuevas sinapsis.
Neuroplasticidad del cerebro y la memoria
Es a través de la neuroplasticidad cerebral que un taxista es capaz de memorizar y visualizar perfectamente cada una de sus rutas.
En el mismo momento cuando su cliente le proporciona su destino, él sabe exactamente por donde va a pasar. Para hacerlo, él no tiende a proporcionar ningún esfuerzo particular.
El cerebro simplemente se adaptó a los hábitos y memoria visual-espacial llegó a ser más eficiente, en comparación con la de un individuo lambda.
La memoria procedimental se afila a través de actividades relacionadas con su profesión.
¿Cómo fomentar la neuroplasticidad cerebral?
Para que la neuroplasticidad del cerebro pueda ser más eficiente, son necesarios los ejercicios de gimnasia cerebral.
Se trata de aprender cosas nuevas, una vez y otra vez.
Además, tenga en cuenta que el fumar, el colesterol y la tensión son malos para la plasticidad de las neuronas.
También es importante comer bien y centrarse en los alimentos ricos en antioxidantes como el pescado, frutas y verduras.
Por último, para favorecer la neuroplasticidad cerebral, hay que practicar deportes, evitar el estrés y privilegiar el buen humor. ¡Es tan simple como esto!
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